Laúdes de 7 a 10 órdenes

Laúdes de 7 y 8 órdenes

Laudes de 9 y 10 órdenes

1) Dieffopruchar, venice 1610   (Kunsthistorisches Museum de Viena C45. SAM 41).

Basado en un cuerpo conservado hoy en día como un archilaúd. Este modelo se recomienda para aquellos  que desean una longitud de cuerda reducida sin renunciar a un sonido robusto y potente.

17 ó 31 duelas de arce, peral o fresno rizados, cerezo o tejo*. Diapasón en ébano o granadillo africano. Fileteado de la tapa en ébano . El mástil puede ser de madera maciza (peral o arce) o chapado en ébano.


Longitud de cuerdas: 62.5 cm (8 trastes en el mástil) hasta 69 cm (10 trastes en el mástil).

Versión con 17 duelas y mástil y clavijeros sin chapar: €5170  

Versión original con 31 duelas y clavijero y mástil chapados (ébano): €6280


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2)     Sixtus Rauwolf, Augsburgo c. 1590 (Colección privada de Jakob Lindberg)

Un muy elegante laúd con un cuerpo con 15 duelas, originalmente concebido como un instrumento de 7 ó 8 órdenes y que produce un sonido particularmente robusto y resonate.

15 duelas de arce, peral o fresno rizados, cerezo o tejo*. Diapasón en ébano o granadillo africano. Fileteado de la tapa en ébano . El mástil puede ser de madera maciza (peral o arce) o chapado en ébano.


String length: 63.5 cm (8 tied frets) , 67 cm (9 tied frets), 71 cm (10 frets)

With solid neck and pegbox: €5120

With (ebony) veneered neck and pegbox: €5395


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3) Magno Dieffopruchar, Venecia 1612 (Bologna, Museo Civico Medievale).

Un instrumento voluminoso  con una forma representativa de la escuela veneciana  que permite una longitud de cuerda relativamente corta para su tamaño.


Longitud de cuerdas: 64.5 cm (8 trastes en el diapasón), 67cm (9 trastes) y 71cm (10 trastes).

25 duelas de arce, peral o fresno rizados, cerezo o tejo*. Diapasón en ébano o granadillo africano. Fileteado de la tapa en ébano . El mástil y clavijero chapados en ébano: €6280


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4) Hans Frei (Warwick County Museum Nr. 162).

11 duelas de arce, peral o fresno rizados, cerezo o tejo*. Diapasón en ébano o granadillo africano. Fileteado de la tapa en ébano . El mástil puede ser de madera maciza (peral o arce) o chapado en ébano. .

Longitud de cuerdas: 65 (8 trastes en el mástil) hasta 68cm (9 trastes en el mástil).

Sin chapar: €5070

Chapado (ébano): €5345.


Estos cuatro modelos podrán ser encargados con solo 9 órdenes teniendo una reducción de €90 sobre los anteriores precios.


*Debido a la escasez y el alto coste de la madera de tejo de calidad adecuada para duelas de laúd, los instrumentos construidos con esta madera tendrán un suplemento de 230 € sobre los precios marcados.


1)    "Virgdung". Modelo propio de un hipotético laúd de 7 órdenes de principios del siglo XVI inspirado en fuentes iconográficas.


Ya en el año 1511, el teórico Sebastian Virdung hace referencia a laudes de siete órdenes.  Aunque el número estándar de órdenes en la primera mitad del siglo XVI era de seis, algunas piezas del manuscrito "Pesaro" y una del del manuscrito "Bologna" de finales del siglo XV ya hacen uso del séptimo orden. Unas décadas más tarde, un reducido número de piezas en “Musica Teusch” de Hans Gerle (escrito en 1532) también utilizan en el séptimo orden. El principal impedimento para la estandarización del séptimo orden fue probablemente un déficit tecnológico que impedía la fabricación de cuerdas tan gruesas con la suficiente flexibilidad para que vibraran de manera óptima. Una vez superadas estas limitaciones a finales del siglo, se popularizaron los laudes de más de seis órdenes.

Este instrumento ha sido diseñado teniendo en cuenta el sonido, la estructura y la estética de un laúd de principios del siglo XVI y, por lo tanto, corresponde a mi modelo "Da Milano" con un orden adicional para ser afinado una segunda o una cuarta por debajo del sexto orden (FA o RE). Este modelo llena un vacío para aquellos músicos que desean “intabular” música vocal polifónica para ser interpretada junto a un cantante o un conjunto vocal, ya que este orden adicional ofrece una gran flexibilidad para la intabulación de contrapunto en diferentes modos, preservando el característico sonido distintivo del laúd de principios del siglo XVI.


Longitud de cuerdas: 60 a 62 cm. 9 ó 11 duelas: €4270


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2)     Jacob Hes, Venecia 1586 (París, Musée de la musique D.AD.40381)

Un  pequeño instrumento con 7 órdenes originales con un tiro ideal para ser afinado en LA.


Longitud de cuerda: 55.4 cm.

15 duelas con clavijero y mástil en madera maciza: €4600

15 duelas con clavijero y mástil chapados: €4830


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3)     Vvendelio Venere, Padua 1592  (Academia Filarmonica de Bologna).

Un modelo adecuado para aquellos que requieren un tiro más manejable.  El cuerpo de este precioso laúd tiene 25 costillas y su mástil y clavijero originales están altamente ornamentados con filetes de maderas contrastadas. Diapasón de ébano o granadillo africano. Fileteado de la tapa en ébano.


Longitud de cuerda: 58.4 a 60 cm.

Versión  de 11 duelas sin chapar: €4550

Versión de 11 duelas con mástil y clavijero chapados (ébano): €4780

Versión de 25 duelas con mástil y clavijero chapados (ébano): €5565

Versión de 25 duelas con las decoraciones del mástil y el clavijero originales: €5800


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4)     Sixtus Rauwolf, Augsburgo c. 1590 (colección privada de Jakob Lindberg)

Un laúd con un robusto y redondeado cuerpo hecho de 15 duelas que fue concebido originalmente como un instrumento de 7 ó 8 órdenes aunque ha sido recientemente reconvertido en uno de 11 órdenes. Este laúd  produce un sonido particularmente resonante y rico.


Longitud de cuerda: 64.5 cm (con 8 trastes atados al mástil) y 68.5 (con 9 trastes atados al mástil)

Sin chapar: €4650

Chapado (ébano): €4880


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5)      Hans Frei (Warwick County Museum Nr. 162).

Una versión de este magnífico instrumento algo más grande que los anteriores. Se ofrece con 7 ó 8 órdenes con un tiro mínimo de 66,5 cm.

11 duelas de arce, peral o fresno rizados, cerezo o tejo*. Diapasón en ébano o granadillo africano. Fileteado de la tapa en ébano . El mástil puede ser de madera maciza (peral o arce) o chapado en ébano. .

Longitud de cuerdas: 65.5 a 70 cm

Sin chapar: €4650

Chapado (ébano): €4880


Estos cinco modelos podrán ser encargados con 8 órdenes por un cargo adicional de €90 sobre los anteriores precios.


*Debido a la escasez y el alto coste de la madera de tejo de calidad adecuada para duelas de laúd, los instrumentos construidos con esta madera tendrán un suplemento de 230 € sobre los precios indicados.



Un  ejemplo reciente del instrumento No. 1.  Hans Frei (Kunsthistorisches Museum de Vienna C34)

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Un reciente ejemplo del instrumento No. 4.  Magno Dieffopruchar (Bologna, Museo Civico Medievale)

Modelo "Dowland"

Diseño original inspirado en el trabajo de los fabricantes venecianos, paduanos y augsburgueses de finales del siglo XVI y principios del XVII, con especial énfasis en los instrumentos de Sixtus Rauwolf que se han conservado.




Este modelo de laúd surge de la idea de encontrar un instrumento ideal para la música del sublime John Dowland y sus contemporáneos ingleses y del resto de Europa. John Dowland experimentó una época de constante cambio musical. Este hecho se vio reflejado en los instrumentos que utilizó y para los cuales compuso a lo largo de su vida. Comenzó su carrera con un laúd de seis órdenes, y llegó a componer para uno de nueve en algunas de sus últimas obras. La idea de utilizar un solo laúd para un repertorio que abarca una carrera tan larga puede ser tentadora, pero debe descartarse si el intérprete se toma seriamente la interpretación de la totalidad de su producción musical. No obstante, debemos ser conscientes de que la mayoría de sus obras, incluidas sus sublimes canciones, pueden interpretarse apropiadamente en un laúd de 7 órdenes. Este es el tipo de instrumento que recomendaría si alguien desea abarcar la mayor parte del repertorio sin demasiadas concesiones, ya que un laúd de este tipo solo descartaría las 5 piezas conocidas que requieren explícitamente 9 órdenes.


Por otro lado, resulta bastante claro que el laúd que Dowland empleó en los últimos años de su carrera debió de ser un instrumento muy diferente a los que había usado anteriormente. Este hipotético instrumento habría tenido 9 órdenes y 10 trastes atados en el mástil, en lugar de los 8 habituales. John Dowland viajó por gran parte de Europa (Francia, Alemania, Italia y Dinamarca) y sin duda estaba muy al tanto del panorama musical europeo y del desarrollo del laúd en el continente. Su conocimiento de la escena musical europea se refleja también en los dos libros de su hijo Robert, en los que incorpora y describe minuciosamente las tendencias musicales y organológicas foráneas.


Una observación que Dowland hace en su "Varietie of Lute-Lessons" de 1610 es especialmente relevante para entender la morfología del laúd que debió de utilizar en la última etapa de su vida:

"porque yo mismo nací treinta años después de que Hans Gerle publicara su libro, y todos los laúdes que recuerdo usaban ocho trastes... algunos años después, la nación francesa alargó los mástiles, aumentando así dos trastes más, de modo que todos los laúdes, que son los más populares y deseados, tienen diez trastes".


Si aumentamos el número de trastes de tripa atados al mástil a diez, en lugar de los ocho habituales to entonces, esto tendrá un efecto drástico en la longitud de las cuerdas y, por tanto, en su afinación y resonancia general, especialmente en el registro más grave. Si tomamos un laúd con una longitud de cuerda de aproximadamente 60 cm y le añadimos un mástil más largo que permita 10 trastes atados, acabaremos con una longitud de cuerda de unos 65 cm. El efecto será que la afinación del instrumento bajará al menos un tono con respecto al de 8 trastes (en términos modernos, pasar de una chanterelle afinada en Sol a una afinada en Fa o incluso Mi). Esto, en combinación con la adición de dos órdenes extra para alcanzar un número total de 9, hará que este instrumento tenga unas cualidades muy diferentes a las de los laúdes anteriores.




7 órdenes. Longitud de cuerda: 59.5 hasta 62.5 cm.

Con mástil y clavijero macizos: €4550

Con mástil y clavijero chapados: €4780


8 órdenes. Longitud de cuerda: 60 hasta 62.5 cm.

Con mástil y clavijero macizos: €4640

Con mástil y clavijero chapados: €4870


9 órdenes. Longitud de cuerda: 65 cm.

Con mástil y clavijero macizos: €4800

Con mástil y clavijero chapados: €5050


El laúd de siete órdenes fue mencionado por primera vez en 1511 por el compositor y teórico alemán Sebastian Virdung en su "Musica getuscht und angezogen”.  Por otro lado, algunas piezas del manuscrito "Bologna" de finales del silglo XV requieren siete órdenes. También es digno de mención el hecho de que en 1556 uno de los aprendices del laudista Bálint Bakfark tenía la intención de comprar uno de estos laúdes. El primer libro impreso que requería del uso del séptimo orden (en solo tres de sus piezas) fue el "Musica Teusch" de Hans Gerle, publicado en 1532. Quizás esto se debe al hecho de que este autor fue también constructor de laudes y esto le inducía a la experimentación. Otra evidencia del uso temprano del séptimo orden es la existencia de un pequeño número de cuadros de principios del siglo XVI donde éste se representa. A pesar de todo esto, la evidencia nos demuestra que el uso del séptimo orden no se hizo común to el último cuarto de siglo, juzgando por los numerosos ejemplos que han sobrevivido.


Los laúdes de siete órdenes son instrumentos muy versátiles. Pueden abarcar la mayoría del repertorio del siglo XVI, permitiendo la efectiva interpretación de mucha música del principio del siglo XVII sin modificaciones o con solo pequeños cambios que no afectan su la esencia musical. Desde mi punto de vista, es el instrumento adecuado para aquellos interesados en abarcar un repertorio lo más amplio posible sin demasiadas concesiones y también para alumnos de conservatorio, especialmente para principiantes. Este orden adicional (en comparación con un laúd de 6 órdenes) no creará demasiada perturbación armónica al tocar el repertorio propio de 6 órdenes, al tiempo que permitirá interpretar la mayor parte de la música inglesa y francesa posterior en él. También ayudará a extender las posibilidades de interpretación del repertorio de laúd y canto, ya que la mayoría de las canciones de laúd inglesas (incluidas las de John Dowland) y las "Air the cour" francesas se pueden interpretar en este instrumento con poco o ningún cambio a la tablatura original. También aporta la posibilidad de comenzar a aprender los rudimentos del bajo continuo en él, ya que el orden adicional permite muchas más posibilidades de cara a un acompañamiento efectivo y eficiente.


A pesar de su popularidad actual, el laúd de ocho órdenes parece haber representado solo un paso diminuto en el desarrollo frenético del laúd en el periodo de entresiglos. Los únicos libros de tablatura que lo requieren específicamente son "Noctes musicae" (1598) de Matthias Reymann, el primer libro de tablatura de Simone Molinaro (1599) y el segundo libro de tablatura de Giovanni Antonio Terzi (1599).


Algunos consideran que este instrumento posee la versatilidad que yo atribuyo al laúd de 7 órdenes. Sin embargo, creo que el orden adicional no ampliará demasiado las posibilidades de repertorio mientras hace que la música anterior (para 6 órdenes) suene bastante alejada del ideal. Por ejemplo, a pesar de que creo que la música francesa e italiana temprana para 6 órdenes (Da Milano, Spinacino, Leroy, etc.) se puede interpretar satisfactoriamente en un laúd de 7 órdenes, considero que los dos órdenes adicionales crean demasiada perturbación armónica no deseada (por vibraciones simpáticas). Esto tiene el efecto de oscurecer y desdibujar la estructura polifónica, la cual es la base fundamental de esta música.


No obstante, lo recomiendo para aquellos que quieran centrarse principalmente en las últimas décadas del siglo XVI y principios del XVII, aunque en esos casos, un laúd de 9 o 10 órdenes podría ser una opción más apropiada.

El laúd pasó de tener 6 a 10 órdenes en menos de 40 años. Esta ampliación tuvo lugar únicamente en el registro grave, donde se añadieron gradualmente más órdenes dobles octavados. Aunque la ampliación del rango fue modesta -sólo un tono desde 7c a 10c-, la resonancia general del instrumento aumentó considerablemente debido a las vibraciones simpáticas de los órdenes adicionales.


Contrariamente a la popularidad de la que parece gozar actualmente el laúd de 10 órdenes, no tenemos muchos instrumentos supervivientes de este tipo, aunque sí bastantes ejemplos de fuentes iconográficas que se suman a nuestro conocimiento de este tipo de laúd. La razón de la escasez de originales que la mayoría de ellos fueron convertidos en laúdes de 11 órdenes. Esta conversión se llevaba a cabo fácilmente: la adición de un "treble rider" libera una clavija, y dejando el 2º orden simple (como es habitual en la afinación de Re menor), se libera otra clavija, aportando con estas dos simples medidas un orden adicional.


En contraste con la evidencia histórica, numerosos músicos y profesores parecen elegir y recomendar tiros demasiado cortos con la esperanza de que esto facilite la ejecución. Estoy convencido de que una persona con manos de tamaño medio, debería poder tocar este tipo de repertorio con una longitud de cuerda de 64 cm como mínimo. Es cuestión de aplicar las técnicas adecuadas y estudiar con inteligencia para dominar sin esfuerzo los pocos pasajes que requieren alguna extensión más pronunciada.


Hay que tener en cuenta que acortar la escala repercute en el sonido del instrumento y en su resonancia, especialmente en los registros graves. Por esta razón, y siguiendo la evidencia histórica, recomendaría un mínimo de 9 trastes atados en el mástil. Esto se traduce en una longitud de cuerdas de 64 a 66 cm para los modelos que se describen a continuación: